En los últimos días, mientras los medios daban cuenta de novedades importantes en la política económica del país impulsada por su gobierno, el presidente de la Nación volvió a realizar una serie de alusiones agraviantes contra periodistas de distintos medios, opiniones y estilos.

En sus expresiones de las últimas semanas, han sido blanco de sus diatribas periodistas como Jorge Fernández Díaz, Marcelo Bonelli, Carlos Pagni y Alfredo Leuco y medios como TN y La Nación.

Como ADEPA ha reiterado, el Presidente está en todo su derecho de refutar informaciones, cuestionar opiniones y replicar críticas. Pero hacerlo desde la agresión, la estigmatización y el señalamiento de intereses espurios frente a quien no se alinea sin matices a la visión oficial puede ser intimidatorio. También degrada el debate público, al cuestionar a los emisores por sobre los hechos y las opiniones.

Un debate puede ser vibrante y apasionado sin caer en la descalificación personal.